Mientras aún podemos visitar en el Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León la exhaustiva muestra «Concretos«, que incide en la relevancia estructural y simbólica del cemento en la arquitectura tras la II Guerra Mundial (prorrogada hasta el 7 de enero de 2024), este centro inaugura este fin de semana otras tres exhibiciones abiertas hasta esa misma fecha: una retrospectiva, una nueva revisión de su colección y un caso de estudio en el Proyecto Vitrinas.
La antología corresponde al bilbaíno Juan Ugalde, que inició en los setenta una producción basada en la hibridación de lenguajes y referencias, desde el Pop Art anglosajón a Fluxus, de Millares a Gordillo. Miembro en los ochenta del colectivo Estrujenbank, una estancia en Nueva York al final de aquellos años y facilitada por una beca Fullbright le permitió adentrarse en nuevos rumbos creativos y en los entresijos del mercado del arte de cara a emprender, ya en los noventa, su carrera en solitario.
Trabajó desde entonces en fotografías en blanco y negro que, por su estética borrosa, contrastaban con la ortodoxia fotográfica predominante y que aplicaba sobre lienzo, dotándolas de mayor intensidad y convirtiéndolas casi en gesto pictórico; y, desde 2007, en pinturas, collages y series de piezas elaboradas digitalmente, así como en vídeos. En unos y otros proyectos ha desplegado un lenguaje a medio camino entre la poesía y el activismo.
Hace siete años, y sin dejar de lado esos caminos personales, volvió Ugalde a unirse a otro colectivo, llamado Imagina Escorial, formado por artistas procedentes de distintas disciplinas que idean propuestas para El Escorial y su comarca, zona donde él reside desde 1998: junto a ellos ha participado en publicaciones, exposiciones y vídeos de corte muy variado, desde la ecología al dadaísmo. Por último, en sus composiciones más recientes, ha dado vida a algunas de sus piezas pasadas, transformándolas en collages a partir del añadido de partes de madera y reestructurándolas desde principios casi constructivistas.
Su retrospectiva en el MUSAC llevará por nombre «La nave de los locos» y reunirá cuarenta trabajos representativos de sus últimas cuatro décadas de trayectoria, haciendo hincapié en la importancia en ella del collage y de las iniciativas colectivas. La propia muestra se articulará como un collage, una acumulación de imágenes que aludirá en su mismo montaje al exceso o la vorágine como conceptos siempre presentes en Ugalde.
En cuanto a la nueva revisión de los fondos del centro leonés, tendrá por comisario a Álvaro Rodríguez Fominaya y por título «Exotermia. Semiótica de la ubicación en la Colección MUSAC». Planteará la relación entre exposiciones y espacios: dado que buena parte del esfuerzo de los comisarios y sus equipos a la hora de diseñar muestras temporales se dedica a la elección de la ubicación oportuna de las piezas, cuestionará este proyecto qué sucedería si ese emplazamiento viniese determinado por reglas universales y en qué medida afectaría a las obras de arte y a nuestra percepción de las mismas.
El dilema no es nuevo, porque en el siglo XVIII ya se vertebró con ese fin una línea imaginaria que debía estructurar cómo colgar las pinturas en las paredes en función de una jerarquía asociada a sus correspondientes géneros; esta vez, se abordarán los sistemas de montaje desde una perspectiva actual y proponiendo diálogos entre esculturas antiguas prestadas por el Museo Nacional de Escultura de Valladolid, proyectos del siglo XX y XXI y la arquitectura del museo diseñado por Tuñón y Mansilla.
Los artistas contemporáneos representados en «Exotermia» son Eugenio Ampudia, Artists» Poster Committee of Art Workers Coalition, Dan Attoe, Txomin Badiola, Ballester Moreno, Gabriele Basilico, Natividad Bermejo, Bleda y Rosa, Alán Carrasco, Gregory Crewdson, Lorca DiCorcia, Rineke Dijkstra, Marcel Dzama, Roland Fischer, Till Freiwald, Philipp Fröhlich, Alberto García-Alix, Anthony Goicolea, Piero Golia, Candida Höfer, Zhang Huan, Isaac Julien, Immo Klink, Ellen Kooi, Leonilson, Lisipo, Jen Liu, Marcos López, Cristina Lucas, Lovett/Codagnone, Josephine Meckseper, Julie Mehretu, Yasumasa Morimura, Zwelethu Mthethwa, Muntean/Rosenblum, Shirin Neshat, Tatiana Parcero, Concha Pérez, Policleto, Praxíteles, Gonzalo Puch, Caio Reisewitz, Thomas Ruff, Ixone Sádaba, Yinka Shonibare, Sam Taylor-Wood, Delhy Tejero, Belén Uriel, Xavier Veilhan, Nicola Verlato y Akram Zaatari.
Por último, el caso de estudio analizado en el Proyecto Vitrinas tendrá como protagonista a Tatiana Parcero. Esta modalidad expositiva, la de los casos de estudio, se inició en el MUSAC en la primavera del año pasado y tiene como fin difundir entre el público las recientes investigaciones en torno a las obras y artistas presentes en las colecciones del Museo, desde una perspectiva interdisciplinar; sus anteriores ediciones se dedicaron a Jordi Bernadó y Concha Prada.
De Parcero se han examinado Cartografía interior #35, Re-invento #22, Re-invento #19 y otra media docena de piezas de su serie Actos de fe, atendiendo a las reflexiones en torno al cuerpo y la identidad que contienen y a su planteamiento formal común: se trata de imágenes en blanco y negro de fragmentos físicos impresas en acetato y superpuestas a fotografías de diagramas de anatomía y códices precolombinos, que al combinarse dan lugar a un mapa cartográfico humano lleno de capas y posibles significados. En el conjunto de su carrera, ha buscado esta creadora mexicana, en sus palabras, redefinir el interior del cuerpo; explorar el espacio interior desde afuera como proceso de autoconocimiento y, al mismo tiempo, tener la posibilidad de mostrar lo que a simple vista no se ve.
Juan Ugalde. «La nave de los locos»
«Exotermia. Semiótica de la ubicación en la colección MUSAC»
«Tatiana Parcero. Caso de estudio en la colección MUSAC»
Avenida de los Reyes Leoneses, 24
Madrid
Del 17 de junio de 2023 al 7 de enero de 2024